El hombre ha dejado claros testimonios desde sus orígenes de la importancia del color.
Ya desde la prehistoria, el ser humano se ha preocupado por conseguir pigmentos que le permitieran realizar pinturas rupestres, y se ha repetido en todas las épocas de la historia y en todos los continentes.
Tras una evolución de miles de años, pasando por etapas de mayor o menor esplendor por lo que respecta a las artes pictóricas, llegamos a la situación de nuestros días. Existe una muy evolucionada industria de la pintura que combina todo el conocimiento acumulado con el paso de los siglos con las técnicas que aportan los desarrollos químicos más modernos.
El origen de ese conocimiento se encuentra en la posibilidad que había de obtener pigmentos inorgánicos en la superficie del planeta, o bien en minas o canteras.
Está documentado que en muchas ocasiones se hacían llegar pigmentos de lugares lejanos, pero en general se procedía a emplear los elementos minerales presentes en el terreno cercano. Así se daba origen a paletas cromáticas reconocibles en la arquitectura y decoración de diferentes zonas y regiones de planeta. Hasta mediados del siglo XX las pinturas se creaban a partir de pigmentos minerales (inorgánicos) o bien a partir de materias de origen vegetal o huesos animales (orgánicos).
A continuación, detallamos un listado de los principales pigmentos tradicionales que se han empleado para la decoración, con los que además tendríamos configurada una paleta cromática completa:
- OCRE AMARILLO: se crea a partir de tierras naturales (pigmentos terrosos) que adquieren ese color amarillento por su contenido en óxidos ferrosos y óxidos férricos. Empleado para pintar al temple, al fresco, al óleo, para añadir a lechadas de cal y silicatos en exteriores.
- OCRE ROJO: se obtiene por la calcinación de ocre (ocre quemado) rico en óxidos de hierro. Con el mismo tipo de aplicaciones que el ocre amarillo, a destacar la amplia utilización como base para la colocación de pan de oro.
- SIENA NATURAL: tierra natural de extracción originaria en la zona de La Toscana italiana. A mitad de camino entre el ocre y el marrón, se emplea sobre todo para realizar variaciones sobre otras tonalidades, por su fácil mezcla y trasparencia. A parte de los usos descritos en los pigmentos anteriores, muy utilizado en pátinas y veladuras de envejecimiento en exterior de edificios.
- SIENA TOSTADO: obtenido a partir de la calcinación de siena natural. En apariencia es muy parecido al ocre rojo, pero en las mezclas con blanco ofrece unas tonalidades menos rosadas. Muy empleado para la obtención de la paleta de color de la piel humana.
- TIERRA SOMBRA NATURAL: de origen mineral natural, se trata de otra tierra de óxidos de hierro, pero con un alto contenido en dióxido de manganeso (MnO2). Con los mismos usos generales que el resto de pigmentos, a destacar el efecto de acelerante del secado que produce su aditivación a pinturas al óleo.
- TIERRA SOMBRA TOSTADA: calcinación de sombra natural, de menor utilización que el resto por alterar bastante la aplicabilidad de las pinturas con las que se mezcla.
- TIERRA VERDE: tierra compuesta por arcilla, óxidos férricos y una pequeña cantidad de manganeso (en cantidad más elevada se convierte en sombra natural). Con poca capacidad de teñido, utilizado para el coloreado de blanco en interior de viviendas, en pintura al fresco, al óleo, y en pátinas artificiales de bronce para simular envejecimiento.
- NEGRO CARBÓN: se elabora con la calcinación de maderas selectas (como la vid). Empleado para el oscurecimiento de otros pigmentos, del yeso y del cemento.
- BLANCO: para la obtención de este color son múltiples los pigmentos utilizados tradicionalmente. De gran importancia no sólo para su empleo “puro” sino también dando matiz al resto de tierras, detallamos los principales:
-Albayalde: se obtiene por la exposición de plomo a los vapores del vinagre, se utilizaba sobre todo para el temple y el óleo. Es un pigmento inestable y prohibido por su toxicidad.
-Creta: tradicionalmente unido a la caseína o al temple para hacer pinturas murales , con gran poder de cubrición.
-Yeso de Espejuelo: es sulfato de calcio dihidratado. Empleado como pigmento de fondo por artistas del medioevo y Renacimiento, empleado también para la elaboración de lápices pastel.
-Litopón: creado a partir de sulfuro de zinc y sulfato de bario, empleado para formular pinturas “baratas”.
-Blanco de Titanio: dioxido de titanio, el blanco utilizado por la industria moderna, es estable y tiene gran opacidad.
- AZUL ULTRAMAR: pigmento creado a partir de piedras preciosas (lapislázuli) originarias de minas de Afganistán (de ahí lo de “ultramar”). Debido a su elevado coste se empleaba para los últimos retoques en azules. Estable en pintura al fresco y al exterior. A principios del siglo XVIII se halló por accidente la manera de fabricarlo de forma sintética (ferrocianuro de hierro o Azul de Prusia) . En la actualidad se elabora a partir de un complejo de silicato de sodio y aluminio con azufre.
- VERDE MONTAÑA: empleado ya en el Antiguo Egipto para la elaboración de pintura de ojos, es un carbonato básico de cobre. Obtenido de la molienda del mineral malaquita, era el verde no azulado empleado hasta aproximadamente el año 1.800, cuando se logró sintetizar un sustituto más económico.
- BERMELLÓN: es el rojo de matiz más intenso, históricamente un pigmento vinculado al mineral Cinabrio, por ser la tierra de molienda que lo inspiró. Es un compuesto elaborado a partir de sulfuro de mercurio. Empleado para detalles de rojos brillantes en cualquier técnica tradicional.
- AMARILLO DE COBALTO: también conocido por Oropimente (derivado del latin “pigmento de oro”). Pigmento muy tóxico, contiene Trisulfuro de Arsénico, poco empleado en la pintura porque enseguida ennegrece. En desuso por su toxicidad y por ser sustituidos a partir del siglo XVIII por los amarillos de Cadmio.
La lista completa de todos los descritos en tratados de Bellas Artes y libros sobre arqueología de la decoración es verdaderamente amplia. A modo de enumeración, aquí mostramos algunos más;Verde de Verona, Ocre Francés, Rojo Pompeya, Verde de Nicosia, Ocre Alemán, Pardo Antílope, Negro de Marte, Hematita natural, Albín, Urchilla, Pavonazo, Minio, etc, etc
Bibliografía:
- CENNINI, C.; El libro del Arte, AKAL, Madrid, 1.988
- McCLOUD, K. ; Las técnicas de pintura en la decoración, BLUME, Barcelona, 1.997
- PARRILLA BOU, Mª A.; El arte de los pigmentos, UNIV. DE VALENCIA, Valencia, 2009